Hoy Jueves Santo la iglesia católica conmemora la institución de la eucaristía en la última cena cuando Jesús se sentó con sus apóstoles para celebrar la pascua y lavó sus pies en señal de servicio del mundo y de los más necesitados.
Todas las parroquias de la arquidiócesis realizaron la eucaristía donde no solo se abre el triduo pascual sino que se conmemora la institución de la Eucaristía en la Última Cena y recordamos las palabras mismas de Jesucristo “Hagan esto en conmemoración mía” dice el sacerdote Luis Estevez.
El arzobispo de San Pedro Sula Miguel Lenihan presidió la misa en la catedral metropolitana y fue concelebrada por el párroco de la catedral Glenis Mejía.
Inició como en todas las celebraciones litúrgicas con la procesión, encabezada por los acólitos, seguida por los ministros y luego el sacerdote y el obispo.
Estévez explicó que la Cuaresma finalizó y se va a celebrar uno de los momentos más importantes del año litúrgico como es la institución de la Eucaristía. El color de ésta celebración es el blanco que cambia por el morado.
Es en esta misa donde se canta de nuevo el Gloria, las campanas suenas y volverán a hacerlo hasta la Vigilia Pascual. El Jueves Santo para muchos representa traición por Judas y tristeza por la víspera de la pasión y muerte de Jesús.
En la homilía, monseñor Miguel Lenihan recordó que en Jueves Santo Cristo celebró las pascua con sus discípulos pero, una pascua distinta porque en est pascua Cristo es el cordero.
“En la iglesia hablamos de cuatro pascuas: la judía cuando el pueblo de Israel celebró su liberación; también la pascua que Jesús celebró con sus apóstoles cuando es el cordero sin mancha; cada domingo celebramos la pascua del señor cada vez que celebramos la misa y finalmente la pascua eterna que celebraremos en el reino de los cielos.
”Hoy en Jueves Santo que es la entrada al triduo pascual hay algunas reflexiones importantes: ¿Que hizo Jesús en la última cena?, instituyó la eucaristía y nos ha dado este don tan especial de su cuerpo y su sangre. Para nosotros los católicos eso significa una comida espiritual y un alimento y por esa razón decimos la cena del señor”.
No hay regalo más grande que la eucaristía y muchas veces hay personas que preguntan cuanto cuesta la misa, eso no cuesta nada pero tiene un valor infinito dijo monseñor.
La iglesia nos invita a reflexionar sobre el valor de la eucaristía y debemos conocer más sobre el significado del cuerpo y la sangre del Cristo porque es presencia explicó Lenihan. No hay manifestación de unidad más grande que la celebración de la eucaristía y por ello se llama comunión aseguró el obispo.
“Nadie está excluido de asistir a misa pero para comulgar hay reglas. La eucaristía es el sacrificio del Jesús y el amor de Cristo manifestado en la Cruz” recordó Lenihan.
El arzobispo recordó que hay escasez de sacerdotes y pidió orar porque sin sacerdotes no hay eucaristía. “Cristo hizo un gesto hermosa en la ultima cena cuando lavo los pies de los discípulos se hizo siervo y esclavo porque el vino a servir no ha ser servido”.
Al finalizar la eucaristía, monseñor Lenihan realizó el lavatorio de pies a 12 niños recordando el gesto de Jesús con sus discípulos.
