Mientras no se reduzca la informalidad laboral, ni habrá desarrollo ni se reducirá la pobreza. El Gobierno debe crear un clima favorable para abrir nuevas plazas.
De los 2.5 millones de hogares que hay en Honduras, el 38.2% tiene como jefa de hogar a una mujer. En América Latina, solo el 4% de los hombres hace tareas domésticas.
Tras el cierre de varias empresas en la zona norte, cientos de mujeres enfrentan dificultades para llevar alimento a su mesa, muchas han emprendido la ruta migratoria junto con sus hijos.