04/05/2024
12:01 AM

Desafío

    El desafío que ya ha recibido con un gran impulso una primera respuesta masiva a la emergencia, abre el camino hacia una solución estable y duradera en el ámbito de la salud tras el siniestro que arrasó al hospital de la isla de Roatán, centro de atención también para la demás población isleña que encontraba ahí el remedio a sus enfermedades con personal médico y de enfermería entregados a su profesión.

    La rápida y valiente acción del personal puso a salvo a todos los pacientes, particularmente a los internos en la sala de pediatría. La velocidad con que se propagaron las llamas causó angustia, pues se temía lo peor. Como dice el lenguaje popular solo se produjeron pérdidas materiales, lo más importante fue salvar las vidas, a lo demás se le puede dar solución y aquí es donde es necesario “despertar” a los funcionarios, agilizar la burocracia y disponer para mejorar, agilizar y culminar lo que hay.

    Señalamos lo anterior porque ya existe un proyecto muy avanzado de hospital que comenzó a construirse hace siete años, pero la culminación de esta obra, pese a la emergencia, no entra en la agenda oficial, según la expresión del alcalde insular. “Se logró que se acelere el proceso de licitación del nuevo hospital que así se adjudique el proyecto y se dé la orden del inicio de la construcción. Con eso esperamos que podamos empezar los más rápido posible la construcción del nuevo hospital, pero siempre va a tarde de 16 a 18 meses la construcción del nuevo hospital. Esa es la solución a largo plazo”.

    Si es emergencia y en verdad lo es, tal como reconoce la titular de Salud, habrá que dar respuestas también con la agilidad y la disponibilidad de recursos propios de emergencia y no dejar en el horizonte con la vista puesta en el campo político. También los isleños y visitantes tienen que aportar, con su buen comportamiento, pues “ahora la atención no es la mejor... Llamo al ‘pueblo de Roatán a ser prudente, que no haga cosas innecesarias”.

    Roatán sigue siendo por décadas el rostro amigable, pacífico y futurista de Honduras en el ámbito internacional muy particularmente en el movimiento masivo de turistas tanto nacionales como los que llegan del exterior en cruceros y por vía aérea, visitantes con más prolongada estadía en territorio isleño. La “perla” del Caribe requiere una atención inmediata y que no quede en aporte de organizaciones e instituciones, sino que “desde ayer” haya recursos más que suficientes para construir el nuevo hospital, como dice el alcalde, si las instalaciones no terminadas no entran en los planes. La sabiduría popular, reflejo de optimismo en situaciones difíciles, enseña que “no hay mal que por bien no venga”.